
Me muevo entre tus caderas
al son de tus gemidos
y cual pantera
emito gruñidos
al dulce vaivén
de tu cuerpo desnudo
y en tu mundo de pasión
¡yo me hundo!
Tus manos se deslizan
mientras tu boca hambrienta
beso a beso me acaricia
y en mi piel va grabando
con su fuego tu nombre.
Ahora sé ya que tú
¡eres mi hombre!
Me haces sentir
que el suelo desaparece
y me conduces al cielo
me mimas, me dices cosas
¡que me estremecen!
Mi corazón de hielo
ya se rompió
abrió sus grietas
y se fundió
ante tanta ternura.
Ahora solo vive en mí
la locura
¡de tenerte otra vez!
2 comentarios:
Un poema donde copulan las palabras en la gran explanada de la creatividad.
Felicitaciones
Víctor Manuel Guzmán
Victor Manuel... gracias por tus palabras. Un abrazo.
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